A pesar de ser tan pequeñas las células se pueden inyectar

A este embrión con tan sólo 18 horas de haberse formado, se le está transfiriendo material genético de otro individuo. La inyección se lleva a cabo con una aguja cuya punta es 100 veces menor que la cabeza de un alfiler. En la UNAM, esta técnica es empleada para conocer las funciones de los genes y con fines prácticos, para pasar características particulares de un individuo a otro.